martes, 13 de septiembre de 2011

El mundo es muy pequeño.

Deje de respirar, mi corazón de latir y ese paratiro estúpido... no me importo por primera vez, porque.... estaba perdiendo la cabeza, me sentía...Yo de nuevo.... Agueda, la chica rara de la escuela... Me sentía diferente.

Era la primera vez que me volvía a sentir así, mi corazón era un colibrí en mi pecho, mi respiración.... volvió hasta que sus labios se apartaron de los míos.

-Puedes irte, le diré a Dean que recoja tus cosas- dijo después, me dieron ganas de golpearlo, ¿Cómo era posible que él pudiera guardar la compostura después de el beso?, sus ojos era traviesos y me retaban a despotrincar contra él, me mordí la lengua y lo ignore.

-Agueda- me llamó.

-¿Qué quieres?- 

-Solo un día- dijo él, tomandome la mano- Dame un día y su decides que no me amas, que no soy para ti, me iré, pero no me dijes solo así.

-Él que no me dio un día fuiste tu-

Ese comentario lo hizo enojar, me lanzó una mirada asesina.

-¿Nunca vas a olvidarlo?-

-¿Cómo puedes creer que puedo olvidarlo?, Yo no ando resucitando a los muertos, perdí dos novios, ¿Crees que eso no es traumatico?-

-¿Siempre que nos veamos vamos a estar peleando?- caminaba como leo enjaulado, ja, ya casi había olvidado que se ponía así cuando estaba nervioso, había olvidado también que la encerrada era yo.

-Eso parece- me levante de la cama y me fui  a cambiar de ropa, cuando volví él seguía allí.

-Dime que es lo que te molesta... ¿Porque eres así?- me tomó le brazo y me hizo mirarlo- La niña que yo conocía le regalaba una sonrisa, era fuerte, siempre estaba dispuesta a ser feliz-

Lo miré por unos segundos, estaba... tan.... No lo sabía, maldición no lo sabía.

-Espero una respuesta-

-Tal vez eso sea, mi predisposición a ser feliz, a dar una sonrisa, a olvidar las cosas malas en mi vida, Los años siguientes fueron un infierno, todas las personas de la escuela me miraban raro.... los meses después era el blanco de todos los noticieros... Y yo trataba de superar que te habías ido que "Habías muerto", así que olvide eso, fui fuerte, fui feliz... Hice lo mejor que pude con mi vida y me ha ido bien.... Y apareces tu,  de nuevo.... Estabas muerto....

-¿Fui algo malo en tu vida?-

No me quedaba más que contestarle con la verdad, no podía mentir, no cuando lo sentía así de cerca, así de fuerte, de imponente.

-No, William, fuiste lo más maravilloso y mágico que me paso-

Entonces, me abrazó, y acarició mi pelo.

-No puedo creer lo mucho que cambiaste- dijo él, aun sin soltarme- Tienes veintiuno ya...

-Si- me sentía como si mi abuelo fuera el que me hablara.

-Dame un día, que sea... lo que tu quieras.... "El inicio o la despedida".... La que sea la aceptare-

Lo miré a los ojos y no pude negarme, simplemente era imposible, asentí, su sonrisa fue grande y deslumbrante.

-Gracias por todo, me tengo que ir- dije yo y salí apresuradamente de la habitación, pero al abrir la puerta choque con una enorme pared de musculos, que me miro sorprendido, atrapandome en sus brazos.

-Sigues viva- dijo él, sonriendome.

-No puedes desaparecerme así de fácil- respondí un poco alterada- Hierba mala nunca muere.

-Pero tu eres como la hierbabuena- dijo él, besandome savemente, cosa que hizo a mi estomago respingar de remordimiento- Hasta hueles a ella.

-¿Sabes que?, Ya quiero salir de aquí, este hospital me da escalofríos- pasé mi brazo por el de él y encaminamos a el ascensor, me permití mirar sobre él hombro de Dean, allí estaba "Mi Doctor" mirandome mientras las puertas del ascensor se cerraban.

..   ...   ..

-¿Segura que te sientes bien?- pregunto nervioso mientras conducía de nuevo a casa.

-Si, solo una pregunta- Lo fulmine con la mirada por el espejo retrovisor- ¿Porque fuimos a ese hospital?-

- Más cercas, mejor servicio, mejores doctores....-

-Ya, ya, ya- me cruce de brazos- Nos quedamos sin adornos para el árbol-

-No te preocupes por eso- se encogió de hombros- Mamá llamo, te manda saludos y me dijo que esperaba te gustara su regalo.

-Si son los aretes que hacen juego con el collar que me mando para mi cumpleaños, puedes ir regresandolo-

La familia de Dean era tan extravagante, se tomaban enserio sus raices inglesas, eran todos formales y remangados, yo... era todo lo contrario.

-Deberías de usarlos en la cena de esta noche- entro al estacionamiento del pen-house- Si es que te sientes bien como para ir a la cena.

-Claro que si, ya tengo el vestido- sonreí.

-Bueno, pues empieza a arreglarte, porque tu duras horas- entramos al ascensor y después a nuestro departamento.

-Hey- grito él, me detuve y lo miré parado debajo de la puerta, sobre él había un muerdago- Es la tradición.

Sonreí y fui a cumplir con mi tarea pero en cuanto volví a besarlo, me acorde de William y de nuestro beso en el hospital, me aparte de Dean como si en vez de besarme me hubiera pellizcado, este me miro confundido.

-¿Pasa algo?- pregunto.

-No.... Yo solo tengo que ir... a la ducha, huelo a hospital caro- dicho esto, le di al espalda y corrí a mi habitación.

.............

Trate con el jabón de borrar la sensación que me causaba el toque de William en la piel, como si fuera tan fácil, ¿Porque acepte salir con él?, ¿Porqué no seguir como hasta ahora?, Pretender que no existía y no complicarme mi enredosa vida.

Salí del baño e hice loq ue pude con mi pelo, recogiendolo en una cola de lado, después fui a buscar el vestido que había elegido para esta noche, era uno rojo, hasta la rodilla con un enorme lazo del mismo color que terminaba en un moño al lado, lo acompañe con medias color negro y unos zapatos de tacón alto, cosa que era un arma mortal en mis manos, pues con mi equilibrio posiblemente caidría en la calle y un autobus me mataría.

Me miré al espejo y quede muy satisfecha con el resultado.

Dean toco a la puerta.

-Tu amigo llamo, ya nos espera en el restaurante-

Respondí con un "Ya voy" y apresurada tomé el bolso y salí de mi cuarto, Dean luchaba con poderse colocar bien el moño del esmoquin que usaba, fui a su ayuda, después lo miré con una enorme sonrisa.

-Estas guapisimo-

-Tu bellizima- Dijo él, me ofreció mi abrigo, tomé su brazo y salimos a la fría noche de invierno.

Las calles eran escenario de Santa Clauses gordos que pedía dinero para los niños pobres, y los niños ricos, iban de la mano de sus padres mirando los aparadores de las tiendas de juguetes, dando saltos, pensando en que encontrarían mañana bajo el árbol de navidad, yo, miraba por la ventana sin ver en realidad, pensando en lo que William me había dicho.

¿Era así de rencorosa?... ¿Quería que sufriera como yo sufrí?.... ¿Era por eso que no quería una segunda oportunidad?...

No me di cuenta de que llegamso al elegante restaurante de comida italiana hasta que Dean abrió mi puerta dejando pasar el helado aire de invierno.

-Vamos- dijo él ofreciendome su mano, la tomé y nos encaminamos a la entrada del establecimiento.

-¿Tienen reservación?- pregunto el chico que atendía la puerta, el lugar estaba repleto, mucha gente elegante venía a cenar aquí, me dio pena el chico, trabajando en Noche Buena.

-Claro- Dean dio la información, el chico asintió y nos guió a una mesa al lado de una pista de baile, allí estab Travis mirando su reloj, estaba también vestido de esmoquin, al vernos se levanto con una enorme sonrisa, me abrazó y estrecho la mano con Dean.

-Esta mesa es para cuatro- comente mientras me sentaba, Dean, como buen caballero recorrió mi silla ayudandome a sentar- ¿Traes a alguien?-

-Cambié de opinión sobre traer acompañante, una vieja amiga nuestra- me lanzó una mirada llena de complicidad- En realidad viene retrasada.

Nos sirvieron vino, yo ya tenía la edad requerida para hacerlo, y lo tomaba porque se veía elegante, pero si podía evitarlo, lo hacía, no era una catadora muy experta que digamos.

-¿La conozco?- pregunto Dean, tomando también de su vino blanco.

-No creo...-

Pero una chica alta, con un vestido negro pegado al cuerpo que dejaba resaltar su esbelta figura, el pelo tan largo y liso que llegaba casi a la espalda baja y unos ojos esmeralada preciosos hicieron que Dean casi se atragantara con el vino.

-Jane- me levante asombrada y ella me sonrió.

-Muy pequeño es el mundo- dijimos los cuatro al mismo tiempo.

Esto debería de ser una broma, una pesada y malvada broma.

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Muajajajajajajaja Soy una maldita... lo sé... pero es genial ser una maldita hahahah


Espero qeu les guste el cap y gracias por sus comentarios, las quiero mucho chicas :D


6 comentarios:

  1. Jane???
    wooo no lo puedo
    creer...
    esto cambiara mucho
    las cosas entre
    ellos estoy casi segura...
    que lindo es William...
    besos

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  2. Wooow O_o
    Creo que ocurrirán cosas interesantes ;)
    Besos ale, sigue escribiendo.

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  3. me he obsesionado con tu blog.....es genial!!!!!!!!!!
    lo encontre hace unos días y x leer todo no he hecho nada del cole
    espero con ansias el siguiente capitulo...
    XOXO

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  4. hey buena historia me encanta <3 por fa sigueme, soy nueva escribiendo y quiero que la leas a ver que tal
    http://gonzaleeta-soulsfound.blogspot.com/ esa esla pag... espero verte por ahi.
    xoxo.

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  5. esta demaxiado :S me carcomo por dentro, publica pronto ya kiero ver q pasa :) a por cierto t dejo mi blog es nuevo ayudame XD:
    http://extranomundorosa.blogspot.com/

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  6. OH DIOS!!
    AL FIN!!

    termine leer toda la historia, me he puesto al dia y sabes que?? me costo son tantos capitulos no has perdido el tiempo chica te felicito y te cofieso llore cuando supuestamente will habia muerto.

    La segunda temporada esta interesante ya todos grandesitos a mi me gustaria que Agueda se quedara con will(el doctorcito xD)

    Agueda dale otra oportunidad!!! No seas mala

    si lo se habeces es bueno ser una maldita jejeje
    te cuidas y espero con ancias el siguiente capitulo
    TKM♥

    bye....

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Sus comentarios me inspiran :D