Natty Gonzales

El martes me calmé un poco, pero mi estado de animo se deterioraba, y todo mundo a mi alrededor lo notaba.

No podía sacar de la cabeza las palabras de mi madre y las de mi padre...

Pensaba que me volvería loca y todo el mundo me preguntaba que me pasaba, pues esa no era mi actitud normal..

También estaba desepcionada de que Diego no se presentara..

-Tampoco vino hoy- suspiré ocntra la ventana mirando al patio..

-Lo lamento Ague- dijo Ale.

¿Que podía hacer?, no había nada que me ayudara en este momento.

Pero por una milagrosa intervencion del cielo, apareció..

El animo me cambio de inmediato y salté casi gritando de alegria..

-¿Pasa algo Agueda?- pregunto la maestra..

-No nada- pero no pude evitar sonreirle a todo mi salón.

-Allí esta- les murmuré- Allí esta.

El animo me había cambiado de un momento a otro, como si con solo verlo fuera suficiente para mi.

Y así era..

Toda la clase estuve ansiosa por que dieran el tiempo libre hasta que lo hicieron..

Casi corró afuera para ver si salia de su salón y así lo hizo, nuestros ojos se encontraron y hubo algo de alivio en ellos, como si él también se alegrara de verme, pero depronto se pusieron denuevo serio y sus facciones también.

-Hola- le salude casi saltando.

-Hola- me respondió serio, mirando a todos lados..

Lo miré fijamente tratando de descubrir que le pasaba.

Parecía como si no querian que lo vieran conmigo o si algo nos vigilara..

Era muy preceptible a los sentimientos y estados de animos de las personas, así que podia ser su tensión..

-¿Pasa algo?- pregunté amablemente.

-Vamos- pusó una mano en su espalda y me guió abajo hatsa llegar a un pedazo de patio solitario.

-¿Me vas a decir que pasa?- pregunte- Diego, ¿Pasa algo?.

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Relatado Will.

Allí estaba otra vez ese nombre, Diego, yo no era Diego Garza, yo era William Murphy, agente y espia juvenil entrenado para tratar con malechores..

No era lo que ella creía y me sentía mal por ello.

¿Pero que podía hacer? ¿Decirle lo que pasaba y porque estaba allí en realidad? ¿Ponerla en peligro?.

Ya estaba en peligro, pero yo no me alejaría de ella.

Tenía algo en sus ojos que la hacía ver infantil e inocente, sus rizos saltarines y cortos le enmarcaban el rostro..

Se había convertido en algo significativo para mi con solo mirarla y ahora que podía tenerla no la iba a dejar ir.

Me seguía mirando con insistencia, era demasiado prespicas.

-Solo quiero estar un rato a solas contigo- mentí sonriendole.

Sabía que no la engañaba, me interrogó con las cejas levantadas mientras que sus ojos cafes se encontraban con los mios.

Me ponía nervioso, más de lo que ya estaba, los oficiales mayores me estaban observando y no sabía donde estaban...

Al final se dio por vencida, aunque estaba claramente molesta.

-Esta bien- se rindió encogiendose de hombros- ¿Que paso contigo ayer?-

Suspiré aliviado, aunque todavía tenía que mentirle.

-No me sentía bien, lamento no haberte llamado-

Ella meneo la cabeza y sus rizos saltaron de una lado al otro.

-No tienes porque hacerlo- dijo fríamente.

Sin pensarlo dos veces la abracé dejando atrás mi nerviosismo.

Queria decirle "Lo siento, perdoname por ser un mentiroso" queria tener algo real, pero no podía..

Ella no reaccionó de inmediato se quedo allí pasmada y su respiración se entrecorto, pero después también me devolvió el abrazo.

Pero empezó a llorar, rapidamente me soltó y me dio la espalda, no queria que la viera llorar.

Me preocupe rapidamente, y la sujete por los hombros.

-¿Que pasa Agueda?- pregunté.

.  .   .

Estaba actuando como una tonta sentimental, bueno era normal ¿No? Al fin soy una adolescente.

Pero sabía que si me iba me doleria muchisimo separarme de él, estaba enamorandome de él lentamente y ahora que ya podía tenerlo, me iria.

Me estaba ahogando en un baso de agua..

-Nada- me sequé las pocas lágrimas que salieron y lo miré.

Al fin y al cabo él tampoco me decía la verdad.

-Puedes decirmelo- dijo él aun sujetandome los hombros- Esta bien.

Me debati en decir o no decirle, él no se abria conmigo, no era sincero..

Pero yo podía hacer que eso cambiara.

-Mi padre va a ganar la custodia y me quiere llevar a Los Angeles, con su esposa e hija- le conté.

No apartaba los ojos de los suyos, miraba como cambiaban y sus pupilas se dilaban.

-Yo no quiero irme a Los Angeles y menos con esas dos brujas allí metidas- le dije y él me abrazo de nuevo.

-No dejaré que te vayas- me afirmo y por alguna razón le creí.

Era la unica cosa que le creía y estaba aferrandome a creer que estaba loca, que él era sincero conmigo, pero me trataba de engañar a mi misma.

Me estaba mintiendo acerca de algo, pero sabía que lo hacia por algo.

Su celular volvió a sonar, se aparto de mi y contesto.

Se aparto cuando yo mas lo estaba necesitando...


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-¿Ahora que Jane?- pregunté molesto.

-Alejate de ella- dijo ella dandome ordenes.

Camine unos metros pero sin perderla de vista.

-¿Que quieres?- dije molesto- Y deja de vigilarme.

-Tengo reporte para ti, mira enfrente a la oficina del director- me instruyo..

Maldición ¿Hasta sabía donde estaba la oficina?.

-¿Donde estas Jane?- pregunte molesto buscando sobre las copas de los arboles.

Sentí la mirada de Agueda desconcertada sobre mi, sabía que debía de alejarme de ella.

-Espera- le dije a Jane.

-Si lo lamentas, ahora vuelves- dijo ella y se alejo.

Maldición estaba enojada, y tenia razón para estarlo.

-Ya viste lo que hiciste- le dije a Jane molesto.

-Si ahora puedo salir- y colgando saldo de el árbol más cercano callendo con la fluides de una trapecista de pie frente a mi- Hola Will- dijo entuciasmada.

-¿Que diablos haces aquí?- le dije tapandole la sonrisa con la mano, ella no podía estar allí y menos diciendo mi nombre real.

Se rió a carcajadas..

-Ahora soy Natty- dijo ella- Natty Gonzales.

-¿Crees que esto es un juego?-

-No, tu si, ¿Que onda con esa chica? Tiene un nombre raro, Aguada, Aguila...Umm- sabía que lo hacia al proposito para hacerme enojar.

-Agueda, Jane, Agueda- le rectifiqué irritado- ¿Que haces aquí?- exigí saber.

-El oficial mayor me mando, necesitas ayuda y me han mandado un archivo secreto acerca de ese hombre- señalo al director que iba pasando a unos 20 metros denuestra pocision.

-¿El Director?-

-Mejor conocido como Dr. Lexter- enarco las cejas.

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Se que les dije que hasta el lunes pero es que no puede esperar a que vean estos capitulos, creo que me estan quedando geniales, asi que espero su opinion!!!

No odien a Jane, ella esta solo celosa