Secrets.

Tell me what you want to hear

Something that were like those years

I´m sick of all the insincere

So I´m gonna give all my secrets away..

This time 

I don´t need another perfect line

Don´t care if critics ever jump in line

I´m gonna give all my secrets away.

Secrets- One republic.

Hablamos un rato hasta que mi bateria murió así que me fui a acostar...

Pero no podía dormir, estaba entre emocionada y asustada...

La untima vez que me enfrente a este sientimiento terminé sufriendo mucho, se me había hecho casi extraño encontrar otros ojos que me hicieran sonrojar...

Todavia recordaba lo confundida que estaba cuando al entrar a insituto no conocia a nadie, estaba allí parada sin saber que hacer o decir mientras que golpeaba con el popote el aluminio que cubría el yogurt bebible...

-Maldición- solte cuando el plastico se doblo y no logré meterlo..

-Lo hacias con mucha fuerza- dijo la voz que venía detrás de mi, me volví y me encontre con los ojos más bonitos que había visto, baje la vista avergonzada..

-De todos modos no quería beberlo- tiré el popote a la basura y estiré mi mano a él- Soy Agueda- me presenté..

Tomó mi mano y estrechandola dijo su nombre.

-Johnathan- yo retuve su mano más de lo necesario, así que cuando me di cuenta la solté rapidamente y me puse roja como un tomate.

Eso fue el principio de lo que fue mi amistad con él, aunque sabía que no lo era del todo para mi, pues mis amigas me decían que lo miraba como si lo adoraba, o algo por el estilo, y si era verdad, con él a mi lado me sentía segura, era como si el tiempo lo volviera cada vez más indispensable, era importante para mi que aunque no lograba comprenderme del todo, siempre se reia conmigo y de forma insesperada sus ojos tomaban un tipo de brillo diferente al mirarme por largo rato, me ponía nerviosa y sentía que las cosquillas recorrían mi piel, pero nunca dije nada, me aterraba la idea de poder perder su amistad y en cosecuencia perderlo a él, que era lo más importante que tenía...

Hasta que un día mientras regresabamos de tomar un helado tímidamente me tomó la mano y acercandose a mi oido murmuro.. "No dire más ¿Me quieres tanto como yo te quiero a ti?"...

Me había palpitado el corazón tan rápido pensé me daria un paro hasta que las mejillas me ardían, estaba nerviosa...

El "Si" se formulo en los labios y sin esperar nada, allí en media calle, se había parado frente a mi y se había inclinado para besar mis labios..

Mi ciento de hadas  había cambiado tres meses después, cuando su actidud cambio y nos veiamos menos, pero cuando le preguntaba que pasaba me sonréi y me besaba diciendo que todo estaba bien, que no dudara que me queria...Pero un día se fue...Sin decirme a donde se iba o que pasaba, solo se fue...

Se fue y me dejo con el corazón destrozado..

Pero nunca se lo mostré a nadie, no era de las personas a las que les gustaba que las vieran llorar...

Después de eso, me inventé la terapia de las cartas, le contaba en ellas casi como un diario como iba mi vida como si tuvieran alguna contestación...

Para mi siempre será un misterio porque se fue y a veces me pregunto si ya no me queria...

"Y después apareciste tu"- murmuré con algunas lágrimas saliendo- "Diego, apareciste tu"..

Estaba dispuesta a enamorarme...

Era como cuando la gentes dice "¿Porque no me saco la loteria?" como dijo Nana una vez "¿Has comprado algun boleto?" pregunte en respuesta, "No", "Entonces si no apuestas no puedes ganar"..

Ahora comprendo la veracidad de mis palabras, si no me arriesgo no gano por miedo a perder..

Saqué mi libreta y escribí en ella.

No tengo nada que perder...Pero mucho que ganar..

No iba a dejar que el recuerdo de Johnathan me quitara mi felicidad..

Cansada de pensar y sentir cerré mis ojos..

Cuando los abrí ya era de día, sentí como si no hubieran pasado menos de 1 minuto, fue como un parpadeo..

Genial..Murmuré levantandome de puntillas para ir a la ducha...

Mi día se redujo a comer y buscar que ponerme para mi cita, en realidad estaba nerviosa y no lograba encontrar algo que me gustara o no sabía como debía actuar con Diego..

Con Johnathan fue algo generico y natural, así que no debía de forzar las cosas con Diego...

Empecé a ser una lista mental de cosas que hacer y no hacer...

-¿Que tal este?- preguté poniendome enfrente del espejo con la blusa que tenía en las manos- ¿O la negra?..-Creo que la morada es mejor...

-Agueda, ¿Estas hablando sola Cariñio?- pregunto mi amdre tocando a mi puerta..

-Si mamá- le respondí...

Tal vez pensaba que estaba loca o no, no importaba demasiado..

Mirpe mi pelo, no me obedecia para nada, y cuando estuve a punto de plancharlo con las tenazas me arrepentí, eran parte de mi y me sentía mal maltratandolo...

al final terminé con la blusa morada unos modestos aretes y el pelo suelto, como siempre y unos zapados negros nada más de piso..

Me sentía bien conmigo misma, pero cuando el timbre sonó a la hora acordada...

Me miré por ultima vez al espejo y corrí tomando mi cartera abrí la puerta rapidamente mientras gritaba.

-Me voy- dije cuando ya la cerré..

Allí estaba, casi se sentía como un alivio después de haber pensado toda la noche en Johnathan y aunque me sentía mal por ello, pues sentía que lo usaba no era así, Johnathan se había ido y yo etsba aquí, además la sensación que corrió por mis venas al ver a Diego, sus ojos me seguian quitando la respiración y la sonrisa que me dedico casi hizo que el corazón saltara de gusto.

-Hola- le saludé.

-Hola- vi el auto que estaba estacionado enfrente de mi casa, era un mini cooper color negro..

-¿Es tuyo?- le pregunte un poco fasinada, me gustaban mucho los autos..

-No, es de mi tio, con el que vivo, vamos- sus mejillas se tornaron de un color rosa muy encantador, era raro verse ruborizar a un hombre camino hasta el auto pero yo no esperé a que me abriera al puerta entre por mi misma..

-¿No te gusta que te abran la puerta?- pregunto cuando entro entre contrariado y diveertido.

-No es eso- agache la cabeza- Es que simplemente no estoy acostumbrada.

Me encogí de hombros queriendole restar importancia.

-Entonces que mal acostumbrada te tienen- ensendio el auto y empezamos a recorrer la calle...

-¿A donde vamos?- le pregunte mirando que saliamos del pueblo hasta que tomabamos las calles empedradas, las fui reconociendo en la obscuridad...

-Ya sabes a donde- respondió..

-Es noche, de seguro no encontraremos el camino entre las plantas- no podía creer que se le ocurriera ir a la cabaña..

-Tengo el plano que hice ayer después de llegar a mi casa, además no me resulta dificil perderme, traigo linternas y algo de cenar...-

-Espera ¿Plano?...- ¿Como había lograda hacerlo?..

-Si, yo bueno, yo tengo memoria fotografica- respondió algo avergonzado.

-¿Fotografica?..¿Quieres decir de esa que nunca olvida nada?- me parecia sorprendente...

-Algo así, aunque es detestable no poder olvidar nada-

-Es más detestable olvidarlo, yo nunca logro recordar las cosas más importantes, como donde estan mis zapatos en las mañanas- él se rió y yo solté una carcajada.

-¿No piensas que soy raro?- pregunto- Es decir, puedo recurdar todo y aprender con rápidez, puedo hablar de miles de cosas...

Yo lo escuchaba divertida..

-Yo también puedo hablar de miles de cosas que no las comprenda es diferente, además ¿Tu no crees que soy rara? Entonces no tienes de que preocuparte- mi mano se alargó sin mi permiso descanzando en su brazo..

Pero de nuevo me pregunte porque estaba allí, personas como él estaban en las mejores escuelas en Estados Unidos o en el extranjero, no en medio de la nada y menos haciendo estas cosas...

Retiré mi mano poco a poco de su brazo..

-Te pueden dañar el auto aquí, recuerda el insidente de trailer-le admetí..

-Lo llevaré hasta adentro, es pequeño así puede entrar- respondió.

Nos quedamos en silencio por un minuto.

-¿Puedo subir el volumen?- miré el moderno estereo.

-Claro- me sonrió.

Así lo hice y la canción era de One Republic, Secrets, amaba One Republic.

Rapidamente me pusé a cantar sin verguenza a que me escuchara, no tenía la voz más hermosa del mundo, pero la mayoria de las estrellas pop tampoco..

-¿Te gusta?- pregunto.

-Me encanta- respondí.

No podía partar la mirada de él aunque él no me estuviera mirando, esperaba que no se sintienra incomodo con mi mirada siempre puesta en él..


Trataba de no mirar el campo, en la obscuridad era algo aterrador, cuando tomamos el estrecho camino pude mirar el árbol y la cabaña, se estaciono a una buena distancia y mientras yo me bajaba él bajo las linternas y la canasta.

-Es tenebroso- comenté al mirar el campo abierto.

-Algo- me tendió una linterna que encendí de inmediato- Aunque yo también tengo una adentro.

-Vamos- me animo y yo lo seguí con cuidado.

Ahora repamos de nuevo por la soga pues él había terminado de destruir mi mal hecha escalera, entramos y él saco algo de la canasta..

-¿Velas?- pregunte tragando saliva..

-Si, son más practicas que las linternas y alumbran para todas direcciones-

Empezó a ensenderlas mientras yo sacaba lo que tenía adentro de la canasta, era pure de papas con sandwiches de pavo y soda.

-Es genial que pensaras en venir aquí- aunque me ponía los pelos de punta la idea y más al estar solos en medio de la nada.

-Algo raro pero espero no te moleste la idea-

-No- termino de esparcir las velas por toda la pequeña estancia y después volvió a mi lado para sentarnos en el suelo.

-Se que no es una comida gurmet pero lo preparé yo mismo- sus ojos se veian brillosos a media luz.

-No hay problema, yo no sé cocinar- había muchas cosas que no sabía hacer.

Nos quedamos en silencio al empezar a comer, el silencio era incomodo y no soportaba estar sin una conversación, pensaba con rápidez y nerviosismo..

Hasta que se me ocurrió una idea recordando la canción que habíamos escuchado en el auto.

-Tengo una idea- le anuncié y él me puso atención- Yo hare preguntas y te me respoderas, pero la verdad y nada más que la verdad- sentencie.

Lo pensó por un momento.

-Esta bien, ¿Que quieres saber?- pregunto mordiendó su sandwich.

Pensé la pregunta correcta, tenía demasiadas.

-¿Que te trajo aquí?- resolví que era la más importante.

-Un hambiente más calmado, más liberador- respondió rapidamente.

-Ya tenías pensada la respuesta- le acusé riendo..

-Si-

-Eso no es justo, ¿Tan predesible soy?- mi pelo se movió de un lado al otro cuando sacudí la cabeza.

-Para nada, solo que pensé que la harías todo el mundo se pregunta eso-

-¿Me la contestarás como espero que lo hagas?- le espete con las cejas enarcadas.

-Bien- se rindió al fin- Es más fácil vivir aquí que en una ciudad como Houston, y más si todo el mundo espera que seas perfecto, que te comportes de sierta manera-

-Aqui y en China las personas esperan eso- le interrumpi..-Lo siento Diego- dije rapidamente y me tapé la boca con las manos.

-Así que mi tía me hablo de aquí, donde ella vive feliz y quitada de la pena- terminó.

-Aun así, ha de ser raro para ti estar aqui-

-No, prefiero estar aqui- sacudió su cabeza con los ojos clavados en mi.

-¿Por que no te gusta Houston?- su mirada me hipnotizaba y no tenía la intensión de apartarla nunca como hubiera pasado hace tres días.

-Era demasiada presión para mi, me pasaron de grados rápidamente, hasta que llegue a casi graduarme del instituto y entrar a la Universidad, era estresante tener todo en mis hombros, así que por ello vine aqui-

Yo lo escuchaba con atención tratando de comprender lo que él me decía, esto queria decir que era un super dotado, inteligente y con multiples talentos..

Trage saliva...

-¿Sabes? La ultima explicación hubiera sido mejor y nos hubieramos ahorrado algunos comentarios- dije un poco nerviosa..

-Supongo, ¿Me toca hacer preguntas?- enarco las cejas.

-Pero si apenas he empezado- resongé pero él me sigió mirando así fijamente..

"No sedas Agueda" "Pero mira esa cara ¿Como puedes negarle algo?"..

-Dejame hacer dos preguntas más- me apresure a contestar.

-Nada más dos-

-Sip- pensé en que preguntar- ¿Que te parece la preparatoria?-

Puso cara de ¬ ¬ tal vez no era la pregunta que él esperaba escuchar.

-Interesante, trato de adaptarme- me sonrió- Pero es dificil.

-No todos nos adaptamos bien, mirá yo todavía no me adapto-

Se rió, con indulgencia, como cuando un padre se rie de la ocurriencia de su hijo.

-Bueno, la siguiente- pusé un dedo en mi mejilla volviendo a pensar- ¿Como es tu familia?-

Ahora bajo la mirada mientras tapaba todo lo que había traido y los volviá a meter a la canasta.

Algo me dijo que habia tocado un punto muy frágil..

-¿Dije algo mal?- se me escapo de los labios.

-No- se levanto y empezó a andar por toda la habitación, la madera en ocaciones protestaba por el peso y las velas se agitaban a su paso, tocaba todo lo que podía observarse y tocarse pero sin mirarme, de pronto me dic uenta de que estaba nervioso de nuevo- Mamá nos avandono cuando yo tenái 10 años, no se donde esta y papá es un investigadordel FBI...

Ok, esto ya se estaba poniendo raro, mente brillante y un padre en el FBI..

Seguía paseando por la habitación sin dejar de mover las manos..

-¿Nunca te estas quieto?- pregunte medio en broma..

-Lo lamento- dijo él y me sonrió.

Volvió a mi lado, pero ya había tomado una atmosfera pesada, rara, alg así como las vibraciones, sabía que me ocultaba algo mientras miraba el nerviosismo con el que movia las manos..

Me ocultaba algo y lo iba a averiguar.


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Ok amo a One republic, así como Stephenie Meyer tiene su inspiración en Muse, yo la tengo en One republic, así que al ver sus videos  escuchar sus letras me entro una idea brillante que cambia el concepto de la historia, demasiado pero que a la vez se que les va a gustar, convinando eso con las novelas que he leido, y mi fasinación por los programas policiacos..

La historia va a tomar un rumbo diferente y misterioso..

Así que vamos a ver a nuestra Agueda enredada en algo que no se espera.

Ni yo misma lo esperaba.

Tambien pienso cambiar el nombre del blog...

Bueno, son muchos proyectos, pero por ahora espero que les gsuta el cap...

Las amo!!...